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Por diseñar castillos sin almenas perdí, otra vez, las llaves de mi casa.

jueves, 16 de febrero de 2012

Tengo un subconsciente traicionero,
que se distrae haciéndome tener pesadillas con la gente que conozco,
que se divierte convirtiendo mis temores en realidad en mi "otra vida"..

Y tú, deberías saber de qué estoy hablando..
Porque tú tienes la culpa,
y uno debería siempre estar atento a las consecuencias de sus actos.
Mi subconsciente me mostraba la escalera,
sólo que al final de la escalera está la azotea,
y si te persiguen
siempre es mejor una huida hacía abajo,
que las alturas son demasiado tentadoras en los momentos de pánico.
Y yo fui tonta, sí...
subí las escaleras de dos en dos,
reponiéndome de cada tropizo
pero con un miedo atroz a que se acabaran..
y así, tonta y temerosa..
llegué a la azotea..
Y sí..quise saltar...
me moría de ganas de morirme en tus brazos,
de un modo sanguinolento y tragicómico..
(ya sabes, todo el mundo fantasea con una muerte dramática),
pero tú no estabas abajo,
si no detrás de mi...
Y no me empujaste...

Y es que yo no sé tener...sueños lúcidos,
ni sé despertar en el momento adecuado..

Y así empezó a llover..
y lo que parecía un final onírico grandioso..
terminó con tu huída hacia abajo,
no huías de mí, no..
si no de algo tan simple y vacuo como el agua..
Y la lluvia se transformó en diluvio
y la azotea se conviritó en piscina..
y yo me quedé a vivir en esa pecera
hasta que el agua me arrugó tanto la piel..
que acabó mudando en escamas..

Y..no, no me convertí en sirena..
mi subconsciente traidor debió pensar que me sentaba mejor ser...
un pez payaso..

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